Queridas familias y docentes del Dailan,
Pasan las semanas y siempre llegamos al viernes con la expectativa que sea la última semana en aislamiento social…El horizonte nos muestra un tiempo más en estas circunstancias. Quiero compartir con ustedes algunas reflexiones; al principio todos pensamos que estábamos incursionando en el home schooling, para la continuidad del plan pedagógico, pero luego nos dimos cuenta que estábamos educando en una situación de emergencia. También los adultos comprendimos que no estamos haciendo home office, ese beneficio muchas veces otorgado por las empresas, sino que estamos en casa trabajando durante una crisis.
En primer lugar, quiero valorar y agradecer enormemente el trabajo de nuestros docentes en los 3 Niveles.
La institución escuela lleva más de un siglo funcionando como lo hace actualmente (hasta antes de la cuarentena), casi sin modificaciones…. ¿en qué momento pensamos que en 4…5…6 semanas podíamos revolucionar todo el sistema y encontrar la forma para que sea perfecta? Las familias y también los docentes y directivos nos vimos atrapados en nuestras casas de un día para otro con los recursos que contábamos….no todos cuentan con computadoras, o teléfonos smart o incluso servicio de wi-fi. Ni nosotros ni ninguna institución pudo acompañar a su personal en prepararse y contar con herramientas para esta modalidad de trabajo.
Me parece también importante reflexionar en que el docente planifica y prepara su clase para un grupo, depende del curso, será más o menos numeroso, más o menos heterogéneo. La experiencia en la casa para cada alumno y su familia puede ser muy distinta. Nosotros siempre contamos con el aula como lugar de adaptación para todas estas heterogeneidades, comenzamos ahora una vez que logramos poner todo en marcha a pensar como trabajar esas particularidades desde esta nueva forma. Ninguno de nosotros eligió la carrera docente pensando en la modalidad online. Si hay algo que disfrutamos los profesores y las maestras es encontrarnos a diario con nuestros alumnos. En eso sí somos expertos.
La docencia es una profesión que requiere de formación y experiencia como en todas las profesiones.
No tenemos la expectativa de que los padres sean “docentes” a no ser que coincida con que realmente lo son. Incluso es muy difícil para una madre docente cumplir el rol docente en casa, enfrentan las mismas resistencias desde el rol de hijo/a, no ven a una maestra ven a su mamá.
La expectativa es que hagan como puedan, lo que puedan, para seguir en contacto con lo escolar. De esto se trata la continuidad pedagógica. Tienen a sus maestras/profesores para hacer las consultas que necesiten en las clases virtuales. Cuando regresemos a la rutina habitual acompañaremos la readaptación de nuestros alumnos. Claramente será más fácil si vienen siguiendo las tareas y clases, salga como les salga. Es como ir construyendo un puente en este “abismo” inevitable, que se nos impuso y no elegimos, con esta cuarentena. También quiero valorar y agradecer a las familias y alumnos que sabemos ponen lo mejor para atravesar este momento.
No conozco docente o directivo que esté cómodo o contento con esta nueva modalidad, por el contrario, veo mucho esfuerzo, estrés, compromiso. Me consta porque entro a observar clases, participo de las reuniones de planificación…podría decir que no ha bajado su nivel de trabajo, sino que se ha redoblado.
Con esto no descarto que se estén cometiendo errores y que haya mucho por adaptar mejor. Esto es como una rueda de auxilio para que los chicos sigan aprendiendo y la institución brindándoles todas las herramientas que están a nuestro alcance para enseñarles. De esto salimos todos fortalecidos y con un montón de nuevas herramientas, pero en el mientras tanto intentemos ser amorosos, solidarios y respetuosos.
Muchas gracias por todos los mensajes que recibimos por todas las vías posibles. Hay mensajes que nos ayudan a mejorar nuestra tarea, los mensajes de aliento y felicitación son una gran inyección de motivación para nuestros docentes y directivos.
Desde el colegio estamos trabajando de manera sostenida para seguir ofreciendo la mejor calidad educativa que podemos dar en este contexto. Esta incertidumbre es muy dura y en mayor o menor medida nos está llegando a todas las familias. La pandemia nos puso un límite enorme…busquemos de manera conjunta colegio y familia los recursos necesarios para seguir avanzando.
ESFUERZO Y AMOR más que nunca…con el cariño de siempre;
Ana Fernández Löbbe
